Besalú está situada en una importante y tradicional cruce de caminos en el este de la Garrotxa. Bisuldunum, su nombre original, era una fortaleza entre dos ríos: el Fluvià al sur y el Capellades al norte.
El nombre de Besalú proviene de la existencia de estos dos ríos, que en latín se llama Bisuldunum.
Besalú fue la sede de un importante condado independiente. Cuenta con un conjunto histórico-artístico medieval considerado como uno de los mejor conservados de Cataluña.
El majestuoso puente románico sobre el río Fluvià es otro de los vestigios del Condado de Besalú, que junto con el de Barcelona, Ripoll y el de Girona, vio el nacimiento de la nación catalana. No sólo por los monumentos se tiene que valorar Besalú, sino también por el aire medieval que ofrecen sus calles llenas de recuerdos.
Conocer la historia del pueblo de Besalú invita a visitarlo y, de este modo, ser testigos de una época que ha marcado un antes y un después no sólo en este municipio, sino también en muchas localidades del resto del país. El estilo medieval que cobra Besalú lo hacen único y especial.